Los viejos rockeros nunca mueren es un disco de Miguel Ríos y la mejor forma de definir el fin de semana de Javier Gómez Noya. A sus 37 años el cinco veces campeón del mundo sigue uniéndose a la fiesta del triatlón de corta distancia. Si el sábado conseguía la medalla de chocolate en el regreso del Grand Prix francés, ayer domingo, apenas 24 horas después de tomar la salida en Chateauroux, el gallego se colgaba el bronce en los Arena Games de la SLT.
Un triple mix novedoso
La Super League Triathlon regresó a la competición bajo su famoso formato de Triple Mix, pero con una gran novedad: la prueba se realizó en interiores y a medio camino entre lo real y lo virtual. Los triatletas nadaban en una piscina de 50 metros pero completaban la distancia en bici y a pie sobre un rodillo y una cinta de correr, respectivamente, con la ayuda de la plataforma Zwift.
Los participantes tenían que cubrir tres veces la distancia de 400 metros de natación, 4 kilómetros de bicicleta y 1 kilómetro a pie. Cada uno de los bloques se realizaba alternando el orden de los segmentos y con un descanso de tres minutos entre bloque. Al final de cada tanda, los triatletas recibían una puntuación cuya suma final determinaría la general.
La victoria fue para Justus Nieschlag, seguido del portugués Vasco Vilaça en un podio que completaría el español. En chicas la victoria final fue para Jessica Learmonth seguida de Rachel Klamer y Valerie Barthelemy.
Javier Gómez Noya: «No esperaba estar en el podio»
«No pensaba que llegaría al tercer lugar después de un comienzo del día bastante difícil», explicó Gómez tras la prueba. El gallego que había competido en Francia la tarde de antes, donde había sido 4º tras Dorian Coninx, Kristian Blummenfelt y Léo Bergère, había viajado en coche desde Francia para llegar a Rotterdam a eso de las 4 de madrugada pudiendo dormir tan sólo cuatro horas.
«Si cometes un pequeño error en este tipo de carreras, lo pagas» y es que la primera tanda no empezó bien para Javi tras un error en una de las transiciones. Por suerte, se pudo reponer del fallo y acabar subiendo al podio. Gómez se mostró sorprendido por el resultado y confesó haberse divertido en una distancia que «no es la favorita de un chico mayor».