La cafeína es, con casi total seguridad, el estimulante más utilizado del mundo. La cafeína se presenta de muchas formas: en forma de café, de suplementos nutricionales, té, refrescos varios, bebidas energéticas y, una cosa que no todo el mundo sabe, en el chocolate.
¿Cómo funciona la cafeína?
El efecto de la cafeína es el de estimular el cerebro, afectando la presión arterial, la frecuencia del pulso, la producción del ácido estomacal y las reservas de grasa. Precisamente por estos efectos, la cafeína es usada por muchos atletas como ayuda potenciadora del rendimiento.
Uno de los efectos principales de la cafeína es que ayuda a movilizar las reservas de grasa. Esto significa que, para entenderlo de una forma sencilla, permite utilizar al cuerpo la grasa como combustible, permitiendo al organismo un ahorro considerable de glucógeno.
Al retrasar el agotamiento del glucógeno muscular, el ejercicio puede prolongarse, permitiendo al deportista realizar un esfuerzo mayor, durante más tiempo y de una manera más rápida antes de la aparición de los síntomas de la fatiga.
No obstante, estas conclusiones deben tomarse con precaución puesto que existen en la comunidad médica deportiva distintos estudios contradictorios. En este sentido, vale la pena destacar un estudio publicado en la Revista de la Organización Internacional de Nutrición Deportiva que afirma que la cafeína en sangre reduce la frecuencia cardíaca durante el ejercicio submáximo, no así en el ejercicio máximo, haciendo que no se observen diferencias significativas en el rendimiento de los atletas. Por el contrario, diversos estudios científicos sí que encuentran dichas diferencias.
Lo que sí cuenta con mayores evidencias científicas, es el hecho de que la cafeína ayuda a mejorar la recuperación después del ejercicio. En distintos estudios se ha observado como el glucógeno muscular aumenta en mayor medida al ingerir una bebida que contenga cafeína y carbohidratos una que contenga únicamente carbohidratos; presentando, además niveles más altos de glucosa en sangre e insulina plasmática, cosa que permite que la recuperación sea mejor y el entrenamiento del día siguiente sea mucho más productivo.
Pros y contras del uso de la cafeína en el deporte
Como cualquier cosa en la vida, el consumo de cafeína tiene pros y contras y, como ya se ha indicado anteriormente en este artículo.
Es importante no perder de vista el hecho que el metabolismo de cada individuo provoca distintas velocidades de absorción de esta sustancia por el cuerpo.
Entre los efectos positivos de la cafeína destacan:
- La cafeína favorece un mayor rendimiento por parte del deportista, especialmente en deportes de resistencia, al retrasar la aparición de la fatiga mediante el mecanismo de ahorro de glucóceno.
- La cafeína puede ayudar al deportista a mantener altos los niveles de energía, haciéndolo sentir mucho más activo.
- La cafeína tiene un efecto estimulante sobre el cerebro, ayudando a relativizar la sensación de dificultad de la prueba y convirtiéndose, de esta manera, es un importante aliado psicológico del deportista.
Entre los efectos negativos de la cafeína destacan:
- Pueden provocar insomnio, nerviosismo, inquietud y malestar estomacal en el deportista.
- En los efectos del consumo de cafeína influye mucho el momento en que se consume. Si la cafeína se ingiere demasiado tarde, cercana a la hora de dormir, influyendo en la cantidad y calidad del sueño y perjudicando, en consecuencia, la recuperación.
- La cafeína puede desatar episodios de la llamada «energía nerviosa» desatando de manera excesiva los nervios en el deportista antes de la carrera y constituyendo un importante handicap psicológico.
Es importante destacar que la presencia de estos efectos negativos será mayor si el consumo de cafeína supera los 500-600 mg diarios.
Efectos secundarios de la cafeína
La cafeína puede presentar variados efectos secundarios, que dependerán de cada individuo, y que pueden adquirir la forma de una mala calidad del sueño, malestar gastrointestinal, fatiga, dolores de cabeza, calambres musculares, deshidratación y ansindad.
No obstante, cabe advertir que estos efectos secundarios aparecerán, normalmente, en casos en los que la ingesta de cafeína sea abundante, corriendo un riesgo muy bajo de presencia de efectos secundarios en casos de ingesta moderada de cafeína.
Nuestra opinión
La cafeína puede presentar efectos positivos en el rendimiento del deportista y, por lo tanto, es totalmente lícito utilizarla. Ahora bien, como todo en la vida, es necesaria la moderación, puesto que un abuso de la cafeína será perjudicial para el propio deportista. En los deportes de élite no existen los atajos, por lo que la mejor manera de asegurar unos buenos resultados es con entrenamiento, buena dieta y descanso. La cafeína puede ser una ayuda en un momento determinado, pero en ningún caso ha de constituir un elemento principal en la vida del deportista.
