«El panorama de las carreras para 2021 se ve cada vez más positivo«, apunta un comunicado emitido por World Triathlon (antigua ITU). La Federación Internacional de Triatlón ha hecho balance sobre el 2020 y ya mira a 2021.
Tras la celebración, con éxito, de varias pruebas en este 2020 tan complicado, hay esperanza de cara al calendario internacional de la próxima temporada.
Con el Campeonato del Mundo de Hamburgo, las Copas del Mundo de Karlovy Vary, Arzachena y Valencia, World Triathlon ha demostrado que es posible un paso seguro por la alfombra azul. Así como la celebración de la Copa del Mundo de Paratriatlón de Alhandra o numerosas pruebas continentales. Cada competición se realizó en estrecha cooperación con las diferentes autoridades competentes, trabajando para implementar las demandas de cada ciudad y país anfitrión. Además, se realizaron evaluaciones de riesgo por la OMS y se expidieron certificados médicos para garantizar la salud de los atletas y organizadores.
«Podemos esperar un 2021 emocionante»
“World Triathlon quiere agradecer a todos sus socios su profesionalismo y el espíritu de estrecha colaboración que han demostrado durante un año turbulento para el deporte en todo el mundo”, ha señalado presidenta del World Triathlon, Marisol Casado.
La española, que espera renovar su cargo este mismo fin de semana, ha explicado que la prioridad de World Triathlon fue desde el inicio de la pandemia «brindar la mayor claridad y certeza posible a todos nuestros atletas y partes interesadas».
«Podemos esperar una enorme y emocionante temporada 2021»
Casado ha señalado la celebración de los eventos internacionales de este 2020, donde «todos hemos soportado mucha frustración y decepción», como «un gran motivo de orgullo para World Triathlon».
La presidenta ha puesto en valor el arduo trabajo de los socios y afirma que podemos «esperar una enorme y emocionante temporada 2021«.
El gran trabajo llevado a cabo por World Triathlon
En Hamburgo, para la disputa del Mundial a una prueba, la carrera se tuvo que llevar a cabo en un circuito completamente nuevo. El nuevo recorrido se vio alejado de la ciudad y aislado por completo de espectadores para cumplir con las regulaciones de la ciudad. Además, la entrada a Alemania se basó en una prueba clara de PCR para todos los atletas y delegaciones.
La Copa del Mundo de Arzachena pudo tomar la salida gracias a las cartas de invitación individuales para todos los competidores y visitantes. Mientras tanto, en Valencia se introdujeron las pruebas de anticuerpos in situ, realizándose pruebas rápidas de PCR cuando fuera necesario.
“De cada evento al siguiente, todos aportaron algo nuevo a la mesa. La opción fácil, por supuesto, habría sido cerrar las carreras, pero la voluntad de los gobiernos, las Federaciones Nacionales, los Comités Organizadores Locales, los atletas y, por supuesto, el World Triathlon era muy fuerte» ha explicado Thanos Nikopoulos, Jefe de Operaciones de World Triathlon.
«Cada evento también tenía sus héroes ocultos, ya sea gestionando la tarea administrativa de permitir que los atletas y sus equipos de apoyo viajen hacia y desde el país anfitrión o asegurándose de que el concepto COVID del evento fuera aprobado por las autoridades locales y el Triatlón Mundial y completamente implementado».