Creo que es inevitable, por su juventud, que este deporte vaya creciendo. Un par de años a un ritmo más piano y un par de años a un ritmo más allegro. Por culpa de la pandemia o no, pero desde entonces el crecimiento está siendo exponencial.
El aumento del nivel en las pruebas del que tanto se habla últimamente, bajo mi opinión, es una consecuencia del crecimiento de este deporte. Dejando a un lado la PTO, Ironman o Challenge, las pruebas que ya estaban en el panorama se van actualizando y las nuevas, ya vienen full equip. Buenos planes de marketing, buena presencia en redes, premios en metálico, retransmisiones en directo, etc.
Couples Championship, un intento dé
En España: Tradeinn International Triathlon 140.6INN, Epic Triathlon, TriXilxes, Infinitri Half Peñíscola… son algunas muestras de ello. En el resto mundo, más de lo mismo. Aparecen pruebas independientes de franquicia, dispuestas a plantarles cara a las “grandes”, o por lo menos intentarlo, como ha sido el caso recientemente del Couples Championship. Un intento dé.
El pasado 6 marzo, tuvo lugar en Florida el Couples Championship, una prueba organizada por el Waterfall Bank – un nuevo banco estadounidense – en la que participaron algunas parejas de triatletas profesionales que fueron invitadas por la organización. El formato era innovador y los premios bastante suculentos. 100,000 $ dólares para la pareja ganadora, algo que podría haber creado bastante interés. Pero me imagino que la gran mayoría de los que estáis leyendo esto no teníais idea de que se había celebrado esta carrera.
Los que sabíais de su existencia, seguramente no lo visteis, o eso espero, porque habríais tirado 11 € a la basura. Como leéis, costaba 11 € poder ver a un dron enseñando las majestuosas playas de arena blanca de Florida. No es ninguna broma.
Ningún triatleta profesional vive de los premios
Es bueno para que este deporte siga creciendo que los premios en metálico en las pruebas vayan aumentando. Pero ningún triatleta profesional vive únicamente de estos premios, la gran parte de su sueldo viene por parte de los patrocinadores, y esos patrocinadores quieren un retorno y parte de ello consiste en que sean vistos.
Algo parecido ocurre con las competiciones, una prueba sin repercusión – Couples Championship – y sin streaming/streaming de mala calidad, no va a atraer nuevos patrocinadores para las siguientes ediciones. Incluso desaparecerán los que ya estaban.
Con esto quiero llegar a que sí, está realmente bien que pongan esos premios en metálico, pero creo que todos los triatletas que acudieron, lo hubiesen hecho igual si el premio para el ganador fuese la mitad, y el resto del dinero fuese destinado a promover correctamente la prueba y un streaming de calidad. Además de no cobrar ese precio por ver la prueba. Saliendo así beneficiados todos.
El triatlón no es un deporte como el fútbol o el baloncesto, donde los fans van a viajar a cualquier parte para ver a su jugador o equipo favorito, pero sí que somos muy frikis y siempre intentamos seguir las pruebas desde donde estemos. Ya sea la boda de la prima Isabel, en la universidad o en el desayuno.
Efecto bola de nieve
Que las pruebas que apuesten por las retransmisiones en directo/streaming pueden beneficiar mucho más a los triatletas profesionales, a la prueba en sí misma, al público y al triatlón en general. La retransmisión es publicidad para la prueba, lo que atrae futuros participantes, atrae triatletas profesionales que a su vez atraen a más participantes y atrae a patrocinadores. Estos patrocinadores traerán más dinero, lo que permitirá que la prueba crezca, mejore y pueda dar mejores premios. Como si fuese una bola de nieve.
Si yo estuviese en la organización de una prueba y quisiera repartir 15,000 € en premios, pero entonces no podría permitir transmitir la prueba en directo, invertiría 5,000 € en una retransmisión y luego repartiría el resto en premios. Así, seguramente la próxima edición puedas repartir 15,000 € o 20,000 € porque tendrás más participantes y mejores patrocinios.
Quiero volver a dejar claro que ningún momento critico el hecho de dar estos premios, todo lo contrario, pero no creo que sea bueno centrar todo el presupuesto de la prueba en eso. También soy consciente de que no todas las pruebas tienen la suerte de poder permitirse dar premios en metálico o no tienen el presupuesto como para repartirlo entre premios y retrasmisión.