Tras más de 40 años celebrándose en Hawaii, tras dos ediciones sin poder celebrarse, el próximo 7 de mayo se celebrará el Campeonato del Mundo Ironman por primera vez fuera del archipiélago de Hawaii. La prueba tendrá lugar en St. George (Utah).
Varias ciudades interesadas
Los continuos aplazamientos y cancelaciones de la prueba, han llevado a que los triatletas se cuestionen si el Campeonato del Mundo Ironman debería tener una sede rotatoria, al igual que ocurre con el mundial de 70.3 u otros campeonatos del mundo y continentales de la World Triathlon.
La revista local Big Island Now ha estado hablando con parte del equipo de Ironman: «No nos urge mantenerlo en Utah, sin embargo, varias otras ciudades de todo el mundo nos han preguntado si el Campeonato del Mundo de Ironman rotará de manera similar al Campeonato de Ironman 70.3«.
Kona es hogar
Aun así, Ironman ha confirmado que su pretensión es que Kona siga siendo la sede del mundial, ya sea en el formato tradicional (un solo día de carrera) o en el nuevo formato de carrera, dividido en dos días para poder albergar a tanto los grupos de edad como profesionales. El primer día será el turno de las chicas y el segundo el de los chicos. Otro tema que ha traído mucha controversia.
«Kona es un lugar especial y una parte muy importante de nuestra historia, nuestra intención es continuar haciendo de Kona nuestro hogar y regresar cada año», comentaba Diana Bertsch, vicepresidenta senior de Ironman para eventos del Campeonato del Mundo.
No todos piensan igual
No todo el mundo piensa igual. Kona es una “ciudad” de apenas 15,000 habitantes que cada vez que llega octubre, se ve desbordada. A algunos de los locales, cada vez les gusta menos esto y no se quieren ni imaginar como será en 2022 con el aumento de participantes.
Pero los locales no son los únicos a los que no les importaría que fuese a partir de ahora una sede rotatoria, la ex-triatleta profesional Heather Wurtele dio su opinión justo sobre este tema en la revista Triathlete: “No, no hay nada como nadar en el océano en Kona. Los triatletas en bañadores y ver a la gente en Dig Me Beach durante la semana de la carrera es bastante espectacular, pero si apartas la mirada de la gente que está en el agua, verás a los lugareños, comprensiblemente gruñones, poner los ojos en blanco mientras miles de triatletas descienden a su pequeña comunidad”.
Más justo
La canadiense añade que un formato rotativo provocaría que los triatletas tuvieran que adaptarse a diferentes climas en lugar de estar específicamente acostumbrados al clima hawaiano. El calor no es algo que le gusta o le viene bien a todo el mundo, por lo que sería algo más justo para los atletas que generalmente prefieren las carreras en climas más fríos y menos húmedos.
Vosotros, ¿Qué opináis?